“En aquel tiempo los discípulos vinieron a Jesús, diciendo: ¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?  Y llamando Jesús a un niño, lo puso en medio de ellos, y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.  Así que, cualquiera que se humille como este niño, ése es el mayor en el reino de los cielos.”  Mateo 18:1-4

 

Hoy me desperté pensando en lo sencillo que debe ser para las personas creer en El Evangelio. Independientemente de lo que los “profesionales” puedan enseñar en todo el mundo, me pregunto porque nadie se cuestiona el hecho de que el mundo aun no esté sobrepoblado.

 

En una rápida búsqueda en Google encontré que supuestamente la humanidad tiene una antigüedad de seis millones de años, la actual forma evolucionada de la humanidad (supongo que seríamos nosotros) tiene alrededor de 200,000 años, la civilización como la conocemos tiene alrededor de 6,000 años y la revolución industrial empezó en 1800. De por sí, dicha declaración evolutiva de incredulidad se alinea con la Palabra de Dios con respecto a que el mundo tiene alrededor de 6,000 años, así que estoy de acuerdo con la parte de la civilización y en cualquier libro se podría verificar rápidamente el tema de la revolución industrial. Pero con respecto a la raza humana, si la forma actual de los seres humanos es así desde hace 200,000 años, entonces, ¿por qué la población mundial no es mucho mayor?

 

En 2000 años, de acuerdo con quienes han realizado dicha investigación, la población se ha incrementado de entre 170 a 400 millones de habitantes, multiplicándose progresivamente hasta el día de hoy en alrededor de 7.5 mil millones de personas. Si la raza humana fuese tan antigua como indican aquellos que niegan que hemos sido creados, nuestra población habría excedido ampliamente la habilidad del planeta de contenernos. En algún lugar he leído que el mundo puede contener alrededor de 50 mil millones de personas, si fuera cierto que evolucionamos, hace mucho rato hubiéramos excedido ese número  y estuviéramos en camino a los 500 mil millones de habitantes o más.

 

Recuerdo que hace unos años atrás tuve un debate mientras trabajaba lavando platos después de la secundaria en un restaurante muy concurrido. No recuerdo como empezó pero una chica con la que estaba trabajando proclamó que ella no creía en Dios pero sí en los demonios. La observé y pronuncié un argumento sencillo: si hay demonios entonces hay ángeles, si hay demonios entonces existe un diablo, si hay un  diablo entonces existe un Dios, por lo tanto, si existe un Dios entonces hay un Cielo y si hay un Cielo hay un infierno y si no recibes la salvación entonces estás de camino al infierno. Con ello, se quedó callada.

 

Cuando estaba en la secundaria no había debates sobre la existencia de una persona llamada Jesús. Incluso los profesores no creyentes lo reconocían. El problema fue que ellos no creían que Jesús era el Cristo y que era el Hijo de Dios que murió en la cruz por nuestros pecados. El argumento es tan pero tan antiguo que debemos remontarnos a cuando Jesús estaba predicando el Evangelio a Israel.  Incluso se mantiene la pregunta ¿por qué Dios dejó que su Hijo Jesús muriera en la cruz? La respuesta es muy simple. Él murió por tus pecados.

 

“Salieron Jesús y sus discípulos por las aldeas de Cesarea de Filipo. Y en el camino preguntó a sus discípulos, diciéndoles: ¿Quién dicen los hombres que soy yo?  Ellos respondieron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, alguno de los profetas.  Entonces él les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy? Respondiendo Pedro, le dijo: Tú eres el Cristo.”  Marcos 8:27-29

 

“Y se cumplió la Escritura que dice: Y fue contado con los inicuos.  Y los que pasaban le injuriaban, meneando la cabeza y diciendo: !!Bah! tú que derribas el templo de Dios, y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo, y desciende de la cruz.  De esta manera también los principales sacerdotes, escarneciendo, se decían unos a otros, con los escribas: A otros salvó, a sí mismo no se puede salvar.  El Cristo, Rey de Israel, descienda ahora de la cruz, para que veamos y creamos. También los que estaban crucificados con él le injuriaban.  Cuando vino la hora sexta, hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena.  Y a la hora novena Jesús clamó a gran voz, diciendo: Eloi, Eloi, ¿lama sabactani? que traducido es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?  Y algunos de los que estaban allí decían, al oírlo: Mirad, llama a Elías.  Y corrió uno, y empapando una esponja en vinagre, y poniéndola en una caña, le dio a beber, diciendo: Dejad, veamos si viene Elías a bajarle.  Mas Jesús, dando una gran voz, expiró.  Entonces el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo.  Y el centurión que estaba frente a él, viendo que después de clamar había expirado así, dijo: Verdaderamente este hombre era Hijo de Dios.”  Marcos 15:28-39

 

“Y no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada, sino también con respecto a nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los muertos a Jesús, Señor nuestro, el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado para nuestra justificación.”  Romanos 4:23-25

 

“Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.”  1 Juan 2:2

 

El Evangelio es muy claro: sí, fuiste creado; sí, el pecado ingresó al mundo a través de Adán; sí, todos nacimos en pecado. Cada persona, cada alma, a quien Dios ha forjado (Psalms 139:15) necesita un Salvador, el Único camino hacia la Salvación es a través de Jesucristo y NO HAY OTRO CAMINO. Una vez que las personas se dan cuenta que están perdidas, que están de camino al infierno es ahí en donde creen en Dios y sienten que deben creer en Jesús, el Autor de nuestra Salvación. Sólo cuando llegan a este punto del arrepentimiento cristiano, saben que sus obras pecaminosas son merecedoras del juicio eterno de Dios y es ahí donde se dan cuenta de la magnitud del libre regalo de la Salvación a través de Jesucristo, ellos vienen a Él no sólo con un corazón arrepentido sino, con un corazón que cree en Jesucristo. Tan pronto como ello sucede, son una nueva criatura pero ya no se encuentran bajo la misma condena ya que, ahora son hijos del Altísimo en Cristo Jesús Nuestro Señor.

 

“Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.”   Romanos 5:12

 

“Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos.  Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.”  1 Corintios 15:21-22

 

“por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios”…  Romanos 3:23

 

“Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.”  Juan 14:6

 

“y habiendo sido perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen”…  Hebreos 5:9

 

“Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.  Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús, para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.  Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.  Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.

 

Reconciliación por medio de la cruz

 

Por tanto, acordaos de que en otro tiempo vosotros, los gentiles en cuanto a la carne, erais llamados incircuncisión por la llamada circuncisión hecha con mano en la carne.  En aquel tiempo estabais sin Cristo, alejados de la ciudadanía de Israel y ajenos a los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo.  Pero ahora en Cristo Jesús, vosotros que en otro tiempo estabais lejos, habéis sido hechos cercanos por la sangre de Cristo.  Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación, aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz, y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades.  Y vino y anunció las buenas nuevas de paz a vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca; porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre.  Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu.”  Efesios 2

 

Jesus said, “Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente.”  Lucas 13:3

 

“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”  2 Corintios 5:17

 

¿Cuánto tiempo vas a seguir creyendo en las mentiras del diablo? ¿Cuánto tiempo pasará antes de que despiertes del letargo y que te des cuenta lo simple qué es? Entonces, ¿cuándo te des cuenta que estás equivocado seguirás rehusando arrepentirte y rendirte ante tu Creador? La razón para que muchas personas consideren ciertas las mentiras que el hombre ha creado es bastante simple, no quieren cambiar, quieren que las cosas sigan como están. Bien, cada persona puede adoptar tal punto de vista pero es incorrecto y al final lo guiará a la muerte, a pasar la eternidad en el infierno, sin esperanza.

 

“Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.”  Juan 8:44

 

“Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos.  Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.  Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras.  Y la muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es la muerte segunda.  Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.”  Apocalipsis 20:11-15

 

¿Por qué alguien haría eso?

 

Amen!